El defensor de Córdoba. 30 de octubre de 1925-¡Atención! ¡Atención! ¡Vía primera ocupada por el 103! ¡Atención! ¡Atención! ¡Vía primera ocupada por el 103!-.
Pero no pudo evitarse el incidente. En la tarde del 29 de octubre de 1925 los trenes 104 y 103 chocaron en la estación de Doña Mencía. Ya se habían producido otros percances de distinta naturaleza desde la inauguración de la línea Linares Puente Genil a fines del siglo XIX –el tramo de Cabra a Jaén comenzó en enero de 1893-, pero este choque fue el más grave de todos. Tanto la prensa de Córdoba –El Defensor de Córdoba y La Voz- como la de tirada nacional –ABC- publicaron reseñas de lo ocurrido. No hubo muertos, pero sí heridos y entre ellos el jefe de tren, el interventor, el maquinista y el fogonero, con heridas leves menos el primero de ellos, y los viajeros José Pérez Romero y Ángel Navas Ortiz. Todos ellos serían atendidos por el médico de Doña Mencía don Miguel Jiménez Vargas y otro titular que viajaba en el 104.
El defensor de Córdoba. 31 de octubre de 1925¿A qué fue debido el fallo? ¿A errores humanos o técnicos? Según lo publicado por El Defensor de Córdoba en su edición del día siguiente, el choque se produjo a las 2,53 horas y fue debido a que el maquinista del 104 Antonio Silva Delgado se saltó el disco, aunque él afirmaría después que vio el disco abierto.
La Voz de Córdoba. 3o de octubre de 1925Al final, “tanto los empleados como los viajeros, una vez curados, continuaron su viaje para sus destinos y domicilios”. No fue para tanto, por lo que se ve. La Voz de Córdoba también publicó una nota en la página 4 de la edición del 30 de octubre y otra aclaración al día siguiente con la relación de heridos, aunque no añade mucho más a lo que ya publicaba el otro diario cordobés.
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