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miércoles, 9 de julio de 2008

Doña Mencía en los archivos del Estado 01


La red nos depara, afortunadamente, sorpresas positivas. Así, en un magnífico blog sobre la recuperación de la memoria histórica y que aconsejo vivamente consultar –en el último post sobre Negrín se reseñan algunos fragmentos del artículo publicado por Ángel Viñas en El País del martes 8 de julio de 2008 y también podéis hacer una visita virtual a la Exposición que sobre este gran político se celebró en 2006 en el Cuartel del Conde Duque en Madrid y que, afortunadamente pude visitar- encontré una referencia al Portal de Archivos del Estado –PARES- en el que podemos encontrar los documentos que sobre nuestro pueblo se conservan en los Archivos dependientes del Ministerio de Cultura. No todos están digitalizados pero sí hay algunos que conviene dar a conocer. Ahora hablaré de uno de ellos, pero no quisiera dejar a un lado que en esta misma página hay dos enlaces de gran interés: uno de ellos está dedicado al Catastro de Ensenada y en el mismo podéis consultar el libro de Interrogatorios de este documento tan interesante y cuyo original puede ser consultado en el Archivo Histórico Municipal de Doña Mencía. El otro enlace de interés está dedicado al Archivo Rojoun valioso conjunto fotográfico –nos dice en la entrada que- creado por la Junta de Defensa de Madrid como Fondo propagandístico para denunciar los desastres de la Guerra Civil. Posteriormente, fue ocultado y utilizado por el otro bando como instrumento de represión de las ideas políticas. Hoy, sus imágenes, nos acercan más a los actos encaminados para el recuerdo y homenaje de las víctimas de los bandos en guerra y para que la sociedad actual reafirme los lazos de convivencia política y social recogidos en el espíritu de la Constitución de 1978. La foto que adjuntamos más arriba está tomada del catálogo del mismo y corresponde a una escena de dolor tras un bombardeo en Tetuán de las Victorias.

Como muestra de los documentos digitalizados que pueden ser consultados en PARES os mostramos la primera página del Expediente de información y licencia -conservado en el Archivo General de Indias- del pasajero a Indias Juan Pérez de Doña Mencía, natural de Sevilla, hijo de Pedro Pérez de Doña Mencía e Inés González, con su mujer Catalina Díaz, natural de Sevilla, hija de Francisco Díaz e Inés Gómez, y con sus hijas Mayor y Ana, como criados de Juan de Ocón y Trillo, a Costa Rica. El expediente está fechado el 23 de junio de 1603. Ya hablaremos en otros post de las joyas que podemos encontrar en este portal.

viernes, 4 de julio de 2008

Perlas del Archivo Histórico Municipal de Doña Mencía, 09

Destrucción de dos hornos de pan cocer ilegales, 1651

En el acta de cabildo del 11 de diciembre de 1651 podemos leer un documento interesante a través del cual podemos entender mejor el funcionamiento de una villa de señorío, como era la Doña Mencía del Antiguo Régimen, sometida a la jurisdicción del señor, el duque de Sessa y Baena, quien, a través del teniente de corregidor y alguacil de la villa de BaenaDoña Mencía estará sometida a la jurisdicción de Baena hasta tres años más tarde- ordena la destrucción de dos hornos de pan cocer ilegales al ser contra la hacienda del duque mi señor – los tres privilegios señoriales de herencia medieval eran los de molino, fragua y pan-. Lo llamativo es que uno de los hornos pertenecía a Cipriano de la Cruz Tienda, regidor y alférez mayor del cabildo, que es, lógicamente, suspendido del cargo. El otro había sido construido en las casas de Pedro López de Jorge. Los dos serían destruidos con una azada por Francisco de Bala, guarda de campo, en presencia del alcalde, el resto de los regidores y el escribano para levantar acta del suceso.

Y se derribó dicho horno –el primero- sin que de él quedase nada sanado que todo cayó al suelo y de allí fuimos a… -el segundo horno- y se hizo lo mismo por mano del dho guarda de campo sin que quedase en los dichos dos hornos forma ni manera para que en ellos se pudiere cocer pan… Y para que quede claro el asunto, al final del texto se asevera que se toma esta medida para que en adelante fuese tenga entendido que en ningún tiempo se a de permitir se agan hornos en la billa por no estar establecido…

sábado, 21 de junio de 2008

Perlas del Archivo Histórico Municipal de Doña Mencía, 06

Vista de Doña Mencía desde la vía férrea a princioios de los 80

Noticias sobre el primer maestro escuela del pueblo, 1632

¿El primer maestro? Bueno, el primero cuyo nombre aparece citado en el Libro del Concexo de la villa de Doña Mencía que a de estar en poder del escribano de ella por mando de don Juan Delibro corregidor de la billa de Baena y estado en el año de 1615. Así comienza el libro que recoge las Actas Capitulares de las reuniones de Cabildo de Doña Mencía, cuya jurisdicción, hasta 1654, dependía de Baena sometida al mismo señor, el duque de Sessa y Baena. El libro recoge las actas desde el 19 de noviembre de 1615 y su finalidad principal era hacer constar todo lo relacionado con la buena administración de la villa y las penas que se deben imponer a los no cumplidores.

Las primeras actas de las reuniones de Cabildo nos suministran información muy interesante sobre los arrendamientos de los pastos del término –el ramón de la dehesa del Castellar se remató en Fernando Ortiz de Porras por el 29 de noviembre de este año de 1615 hasta el domingo de Ramos de 1616 en 36 reales pagados el dicho domingo- o que en la villa sólo hay –acta de 15 de enero de 1618- un tienda de especería azúcar, cintas y papel blanco cuyo pago como derecho de veintena –que cobraba el señor- ascendía a 44 reales-.

Ya comentaremos algunos otros aspectos interesantes sobre la Doña Mencía de principios del siglo XVII.

En el acta correspondiente al año 1632 y con fecha de 21 de agosto se expone que ha llegado al pueblo Gerónimo Martones al que se nombró maestro de enseñar a leer y escribir y contar a los niños y buena doctrina, por cuya parte se le ha significado padecen necesidad por ser lugar corto y de pocos vecinos y que no puede pasas sin que se le de alguna ayuda de costa acordaron pareciéndoles ser justo dar al dicho maestro el tiempo que asistiera en el dicho oficio tres ducados cada un año de salario…

¿Cuánto tiempo estuvo en el pueblo? No sabemos mucho del tal Gerónimo ni cómo atendía a la diversidad en su aula. ¿Cómo alcanzaba las competencias básicas su alumnado? Aunque la pregunta principal es ¿cómo llegaba a fin de mes?

domingo, 20 de abril de 2008

La fiesta de San Pedro en 1661

Aquel año, el señor de la villa, el duque de Sessa y Baena, conde de Cabra, vino a Doña Mencía. Quiso acercarse a una de sus posesiones -pocas veces lo hizo- y ¡cómo no!- había que agasajarlo debidamente. En la tarde del día de San Pedro se hizo un regocijo de toros y bajados lo que se hiço de la carne de un toro que se mató, cuyo producto -unos 142,5 reales- deben ser restados del gato total de la fiesta. Así consta en el acta capitular del 20 de mayo de 1661, y en la de 22 de junio del mismo año se dan más detalles del costo real ajustándose el mismo en 519 reales, teniendo en cuenta los gastos de toros y también la comida que se hiço al duque cuando estuvo en esta villa.

miércoles, 16 de abril de 2008

La primera cárcel de Doña Mencía, 1654


El documento que reproducimos corresponde a un fragmento del acta capitular del 25 de julio de 1654. En dicha sesión, además de recibir como regidor del Cabildo a Juan Valera Roldán, se leyó el decreto del duque de Sessa y Baena, señor de la villa, por el que se autorizaba la construcción de una cárcel en la villa pues es justo que aya y visto este Cabildo adimitieron y obedecieron con el acatamiento devido ... y mandaron se haga la cárcel en la parte más cómoda y combiniente de la villa... Y, mientras tanto, en las casas señaladas por cárcel en esta villa se echen las llaves suficientes. No iban por ello, por la falta de cárcel, andar los denunciados por la justicia como Pedro por su casa. Faltaría más.

Sobre las fiestas de San Pedro de 1650 II

Los capeos de la fiesta de San Pedro Mártir de 1650 costaron unos 200 reales o, por lo menos, esa es la cantidad que tenía en su poder Diego de Montes, en quien se depositó lo recogido por arrendar las yerbas del Rincón de la Venta a Cristóbal de Salas -vecino de la villa de Baena- y que se destinó a pagar los vaqueros y comida dellos y sogas y Música de la pasada fiesta. Así consta en el acta capitular del AHMDM de 15 de junio de 1650.

lunes, 14 de abril de 2008

Capeos en la fiesta de San Pedro Mártir, 1650

Os transcribo a continuación el texto del acta capitular del 25 de abril de 1650 del AHMDM sobre la fiesta de San Pedro:
"... dixeron que a tenido una carta del Sr Licenciado D. Rodrigo De vida Roldán, Corregidor de esta villa en que pide a este concejo disponga que para la fiesta del sr San Pedro Martir aya algunos capeos y leyda la dha carta acordaron en que si buscasen capeos fuera de esta villa se les causará mucha costa y que para el regocijo que se a referido ay labradores en esta villa que dan algunos capeos y caso que en la plaça donde se librasen se desgraciare alguno de ellos este Concejo los satisfará por lo que dos personas dijeren valer los agora y para el diputado de dha fiesta nombraron al dho jurado Alonso Felipe Romero y el presente en esta vila Lucas de Vera para que los dhos capeos les trayga a la plaça desta dha villa..." 25 de abril de 1650.

Total que para buscar a los toreros fuera del pueblo los había mejores en Doña Mencía, que el Ayuntamiento los socorrería si alguno de ellos se desgraciare.

Este es el primer documento que he encontrado en nuestro archivo municipal sobre la fiesta de San Pedro y su origen. Os iré añadiendo algunos más, también muy interesantes, sobre dicha fiesta.

domingo, 9 de diciembre de 2007

Regocijo de toros en Doña Mencía

Ya hablamos en otra ocasión de las fiestas -no han sido muchas, todo hay que decirlo- de toros celebradas en nuestro pueblo. Pero esto de los toros viene de lejos. En el acta capitular del 25 de abril de 1650 se dice que a instancias del corregidor de la villa se disponga “para la fiesta del señor San Pedro Mártir algunos capeos”. Y como los miembros del cabildo municipal de aquellos tiempos eran tan ahorradores como los de ahora y teniendo en cuenta que si se buscaba a los potenciales capeadores fuera de la villa ello “causaría mucha costa”, sobre todo cuando para el “regocijo hay labradores en esta villa que dan algunos capeos” –siempre ha habido jóvenes atrevidos en el pueblo- “y caso –continua- que en la plaza donde se librase se desgraciare alguno de ellos –que todo pude pasar- este Concejo los satisfará”. Fueron nombrados diputados de la fiesta el jurado Alonso Felipe Romero y Lucas de Vera “para que los dichos capeos los traigan a la plaza de esta villa” (la del Pradillo). En otras ocasiones, como ocurrió siete años después, y como se conserva en una hoja suelta de las actas capitulares de 1657, con motivo de una grata noticia del señor de la villa, duque de Sessa y Baena, “se hizo fiesta y regocijo” también, y este caso acompañado de “fuegos y cohetes y una procesión general en la Iglesia de María Santísima de la Concepción con su máscara”. Ya hablaremos aquí de algunos aspectos interesantes de las fiestas del pasado en nuestro pueblo.

sábado, 17 de noviembre de 2007

4 de junio de 1649

Guardas en la villa de Doña Mencía

Como ya hemos visto en otras entradas de este blog –ver el referido a la historia negra de Doña Mencía (I) y las raíces de don Juan Valera- ante la posibilidad de que cualquier contagio llegase al pueblo el Cabildo tomaba las oportunas medidas para tratar de evitarlo. El acta de la reunión del Cabildo Municipal de 4 de junio de 1649 es bastante expresiva al respecto y también es interesante porque uno de los vecinos encargados de rondar la villa es precisamente Juan Valera Roldán.

El documento que adjuntamos está extraído de las Actas Capitulares de 1649 que se conservan en el Archivo Histórico Municipal de Doña Mencía (AHMDM). Los miembros del Cabildo –ver imagen primera- distribuyen las guardas de la puerta “por donde sale y entra la gente y se reciben los testimonios” -¿se refiere al acceso por la Cruz del Muelle al final de la calle Granada o el otro acceso más cercano a la Iglesia Dominicana proveniente del Pilar de Abajo?-. Creemos que es al primero. Los miembros del Cabildo se reparten la custodia de la villa en cada uno de los días de la semana a partir del domingo 6 de junio de 1649 y han de estar “desde las cinco de la mañana hasta las nueve de la noche” con “apercibimiento”, se dice al final, de que si no lo hacen “se procurará contra ellos” y se les sacará “cincuenta ducados”.

También, en el mismo cabildo –ver la segunda imagen- se “acordó que cuatro hombres vecinos de la villa todas las noches ronden con sus armas de fuego y por de fuera del lugar dando vueltas por él dos por una parte y otros por otra de forma que en llegándose a juntar se vuelvan a dividir en la forma referida”. El lunes por la noche les tocó a Juan Valera Roldán y a Juan Gómez de Alcalá, entre otros.