domingo, 22 de noviembre de 2020

 

VAE VICTIS! Ay de los vencidos! Doña Mencía 1900-1950


22 Biografías de represaliados mencianos. Letra B


Bujalance Jiménez, Gabriel

Adscrito a la quinta republicana de 1939 sería declarado prófugo. Fuente: AHMDM.


Bujalance Jiménez, Pedro

Hermano del anterior, de éste se solicitaron en diciembre de 1936 informes, como fue muy frecuente durante toda la guerra y en los años posteriores, sobre su conducta política y social. En su recurso de revisión, con fecha del 10 de junio de 1941, dirigido al Presidente de la Comisión Nacional de Responsabilidades Políticas que se conserva en el CDMHS,1 por el que le han sido intervenidos todos sus bienes debido a su oposición al “Glorioso Movimiento Nacional”, Pedro Bujalance Jiménez expone que sus únicos bienes son una CASA donde vive toda su familia, construidas a las afueras del pueblo por él y su familia, y más que una casa, afirma, es una CHOZA, y que al serle intervenida si es desposeída de ella se verá obligado, él y toda su familia, a “vivir en el campo a la intemperie”. La sentencia se hará pública en Madrid el 14 de noviembre de 1941, y el breve texto de la misma se inicia señalando que el inculpado era comunista y huyó a la zona roja. Es obrero, tiene esposa y nueve hijos menores de edad y sus bienes ascienden a 700 pesetas. Se considera que, dadas “las numerosas cargas familiares del inculpado y su escasa fortuna y la escasa trascendencia de los cargos que contra él aparecen” se estima reducir a CIEN PESETAS la sentencia económica impuesta al mismo”

 

Revisión presentada por Pedro Bujalance Jiménez ante el Tribunal de Responsabilidades Políticas. CDMHS. Tribunal Nacional de Responsabilidades Políticas. Signatura. 75/00082. 1941-1941. Audiencia. Provincial de Sevilla. Rollo: 00141/1941.

 


Bujalance Urbano, Antonio

Félix Antonio Raimundo Bujalance Urbano, nacido en 1901, será acusado de registrar la casa del farmacéutico Rafael Sotomayor Vargas en la que, según declararía éste, tras una larga discusión y amenazarle “este sujeto y sus acompañantes que ignoro sus nombres se llevaron lo siguiente: una escopeta sistema Remington, un sable, una navaja de afeitar, cincuenta cartuchos de Carabina máuser y una espada con vaina, empuñadura y borla de plata muy antigua cuyo valor era de mil pesetas y recuerdo de mis antepasados” y añadía que los cartuchos a que se refiere eran los de la carabina que días atrás se vio obligado a entregar a Justo Salamanca Urbano, “cuya marca es Remington, no máuser”. Uno de los acompañantes de Antonio Bujalance Urbano era el veterano Antonio Pérez Caballero, padre de María y Antonio Pérez Morejón.


Antonio Bujalance Urbano regresó a Doña Mencía a mediados de abril de 1939, procedente del campo de concentración de Guadix, que, según Carlos Hernández, llegó a acoger a 5.000 prisioneros, y con fecha del 17 de abril hace su primera declaración en el cuartel de la Guardia Civil. El 1 de mayo ingresará en el depósito municipal de Doña Mencía donde estuvo detenido hasta el 6 de septiembre en que fue trasladado, como muchos soldados republicanos vencidos, a la prisión de Cabra, de ésta a la de Montilla y más tarde a la prisión provincial de Córdoba. En una segunda declaración en el cuartel de la Guardia Civil, con fecha del 22 de abril de 1939, y, tras ser “sometido a un prolongado interrogatorio”, afirmará que en la conversación que mantuvo con Vicente Gan Bujalance “acostado en un pajar de dicho pueblo de Cañete durante la dominación roja en el mismo y en fecha que no puede precisar estuvieron censurando la conducta del citado Vilches que acababa de regresar de esta villa a donde había venido desde dicho pueblo de Cañete y volvía con el propósito de traerse a su hijo proponiéndole al declarante y a su compañero que si querían podían venirse a esta con él pues era muy fácil el hacerlo”. 

Comunicación de la dirección de la Prisión de Córdoba sobre la puesta en libertad de Félix Antonio Bujalance Urbano. Córdoba 22 de agosto de 1942. ATMTSS. Bujalance Urbano, Antonio PSU. N.º 16.444 . PS 25464.

 

Al día siguiente, afirmó, que denunció el hecho en el “Cuartel de Milicias rojas, no creyendo nunca que dicha denuncia iba a causarle al citado Vilches tan grande perjuicio, pues luego se enteró que de resulta de la misma había sido detenido y aquella misma noche fusilado”, ignorando que lo llevarían a efecto, aunque creía que había sido ejecutado por las Milicias rojas de Cañete. Nadie de lo que presentaron en Doña Mencía denuncia contra él aludieron a esto hecho, aunque sí lo incluyeron en sus informes el comandante de puesto de la Guardia Civil, el alcalde y el jefe de Falange. En principio, en el juicio celebrado en Córdoba el 15 de diciembre de 1939 fue condenado a RECLUSIÓN MILITAR PERPETUA, pero la sentencia será anulada por el auditor de guerra el 14 de febrero de 1940. A partir de este momento las cosas cambian y en las nuevas declaraciones, a fines de marzo y principios de abril de 1941, del alcalde, Juan Roldán, del comandante de puesto de la Guardia Civil y del jefe de Falange, ya solo hablan de que la acusación está basada en un rumor público, aunque se ratifica la prisión que sufre en la prisión provincial de Córdoba, según el escrito firmado por el Juez militar del juzgado número 5 de Córdoba.


El 18 de noviembre de 1941 se toma declaración al hijo del fallecido, Antonio López Galiano, quien cuenta que con fecha del 21 de septiembre de 1936 “y cuando se encontraba con su padre en un cortijo denominado Rivilla del término de Baena fueron sorprendidos por un grupo de siete u ocho individuos de los cuales no conoce a ninguno obligándoles a que marchasen con ellos al pueblo de Nueva Carteya, el cual se encontraba en manos de los rojos. Allí permanecieron encerrados en el Ayuntamiento y al día siguiente fueron conducidos por una pareja de caballería roja del pueblo de Castro del Río” y cuando llegaron fueron interrogados por un Comité quedando en libertad pero con la condición que si desaparecía alguno de los dos serían ejecutados. Una vez que Castro fue tomado por los franquistas, “cuando la liberación de este por las tropas nacionales por temor marcharon al pueblo de Porcuna y al día siguiente de llegar a éste y cuando se encontraban paseando por la calle fueron detenidos por una pareja de milicianos, los cuales no los conoce ingresando en un cuartel donde metían a todos los detenidos personas de derechas”. Y aquella misma mañana “se presentó un individuo nombrando a su padre del declarante, el cual no se enteró que lo habían ejecutado hasta una vez que se terminó la guerra y llegó a su pueblo” (Doña Mencía).


Tras varias declaraciones, con fecha del 14 de enero de 1942, el comandante instructor comunica al juez militar del juzgado número 5 que “no se ha podido comprobar ciertamente que el encartado Antonio Bujalance Urbano fuese el denunciante del vecino de Doña Mencía Antonio (ahora se cambia el nombre de pila) López Vilches asesinado por los rojos en Porcuna”. En el nuevo consejo de guerra, celebrado en Córdoba a mediados de junio de 1942, Antonio Bujalance Urbano, al no poderse probar la acusación contra éste, es condenado a la pena de SEIS AÑOS Y UN DÍA DE PRISIÓN MAYOR. Con fecha del 22 de agosto de ese año, Antonio Bujalance Urbano, domiciliado en Doña Mencía (Córdoba), calle Anita la Larga (así en el original) número 27, firma la notificación de prisión atenuada en su domicilio.2


Notas:

Antonio Bujalance Urbano aparece en el registro civil como Félix Antonio Raimundo Bujalance Urbano, nacido en 1901 pero no puede ser la misma persona que con el nombre de Raimundo Bujalance Urbano está adscrita a la quinta de 1927, domiciliada en la calle Queipo de Llano 1 y exiliado en Francia.  Además, en la declaración del procesado Antonio Bujalance Urbano, hijo de Francisco y Josefa, cuando llega a Doña Mencía en la declaración que hace ante el comandante de puesto de la Guardia Civil declarará que es de la quinta de 1922. Sin embargo, su nombre no aparece en el listado de esta quinta y no puede ser éste que se incluye en la de 1927.  Y en la de 1936 figura en cuarto lugar, otro soldado llamado Antonio Bujalance Urbano declarado como prófugo, hijo de Francisco y Francisca, por lo que no pertenece a la misma familia.

 

Bustos Salinas, José

Natural de Málaga y alistado en Moriles, con domicilio en la estación de ferrocarril, estaba adscrito al reemplazo de 1935. Adquirió el grado de sargento de ingenieros. (DOMD. Año 1937. Nº 010. Pág. 111). Acceso a la ficha en PARES. 

1  CDMHS. Tribunal Nacional de Responsabilidades Políticas. Signatura. 75/00082. 1941-1941. Audiencia. Provincial de Sevilla. Rollo: 00141/1941.

2  ATMTSS. Bujalance Urbano, Antonio PSU. N.º 16.444 . PS 25464.

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